My Dear People of God,
Happy New Year as we begin our Church Liturgical Calendar! Last Sunday, November 29, the First Sunday of Advent, Bishop Barron, our Regional Bishop of Santa Barbara Region, came to celebrate the 10:00 a.m. outdoor Mass for us. It was indeed a joyous surprise for our parish community to be honored by his visit and to celebrate the Mass for us to open the new Church liturgical year! He left us a message of encouraging us to be God’s instruments as evangelizers by bringing someone back to church when this pandemic is over. Bishop Barron’s visit to our parish community is just a reminder to me that he has not forgotten us, and I thanked him very much for thinking about our parishioners.
Advent is our yearly reminder that God has not forgotten about us, no matter how we may feel. In fact, He never stops thinking of us, and He is leading us with care to our everlasting reward.
We see this truth at work all around us, especially in the way that God constantly brings good out of evil. For example, in 2008, there was this six-year-old girl named Jimena. She was conceived when her mother was only 15-years-old.
Everyone was pressuring her to have an abortion, but she wanted to bring her baby to term. A generous Catholic couple, Pepe and Celia Carredano, took the young girl into their home during her pregnancy. They also helped find a younger couple who was looking to adopt.
Jimena was born, and the adoptive mother was delighted. But after a little while, they noticed that something was wrong: Jimena didn't eat, didn't cry, didn't react to anything, she barely even moved. The family doctor could find nothing wrong and recommended a series of complicated medical tests.
They couldn't afford to pay for the tests, so they reluctantly brought Jimena back to Pepe and Celia, who took her in again and paid for the necessary medical evaluation. When the evaluation was complete, the doctor sat them down in his office. "Well," he told them "It's very simple: Jimena has no brain." She had been born normal in appearance, but with only a brain stem and enough of the cerebral cortex to operate life's most basic functions, like breathing and digestion.
Six years later, Jimena still can't see, hear, move, or talk, but she is miraculously changing lives. She brought a revolution of love into the entire Carredano family. She has completely shocked the doctors, who only gave her a couple of months to live. She has saved the life of at least one Down Syndrome baby whose mother decided not to abort after reading her story. And she is changing minds and hearts when Celia brings her to debates on life-issues.
In this fallen world, terrible things can happen, but God's Providence is powerful enough to turn them around. [Information was taken from "Mission Impossible," a publication of Good News."]
May this Season of Advent heighten our awareness of the coming of the Lord and Savior any time and any moment now! Let us remember that God’s kingdom is already at hand and He is making a difference in our lives and through us changes other people’s lives. Let us remember also that God will never abandon us, He will always be there for you and me especially in time of need and in time of crisis!
Peace,
Fr. Riz
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Mi Querida Gente de Dios,
¡Feliz Año Nuevo al comenzar nuestro Calendario Litúrgico de la Iglesia! El domingo pasado, 29 de noviembre, el primer domingo de Adviento, el Obispo Barrón, nuestro Obispo regional de la Región de Santa Barbara, vino a celebrar la misa al aire libre de 10:00 de la mañana. Fue una gran sorpresa para nuestra comunidad parroquial sentirse honrada por su visita y celebración de la misa para comenzar el año nuevo Litúrgico de la iglesia. El nos dejo un mensaje animándonos a ser instrumentos de Dios como evangelizadores para traer una persona a la iglesia cuando termine esta pandemia. La visita del Obispo Barron a nuestra comunidad parroquial es un recordatorio para mi que no se ha olvidado de nosotros, y le agradecí mucho por pensar en nuestros feligreses.
El tiempo de Adviento es nuestro recordatorio anual de que Dios no se ha olvidado de nosotros, no importa como nos podamos sentir. De hecho, El nunca deja de pensar en nosotros, y El nos esta guiando con bondad a nuestra recompensa eterna.
Nosotros vemos esta verdad trabajando en todo nuestro rededor, especialmente en la manera que Dios constantemente trae el bien del mal. Por ejemplo, en el 2008, había una niña de seis años llamada Jimena. Ella fue concebida cuando su madre solo tenía 15 años.
Todos la estaban presionando que tuviera un aborto, pera ella quería dar a luz a su bebe. Una familia generosa Católica, Pepe y Celia Carredano, le abrieron el hogar a la joven niña durante el embarazo. Ellos también le ayudaron a una pareja joven que buscaba adoptar un bebe.
Jimena nació, y la mama adoptiva estaba encantada. Pero después de un poco tiempo, ellos se dieron cuenta que algo estaba mal: Jimena no comía, no lloraba, no reaccionaba, ella apenas se movía. El doctor de la familia no podía encontrar algo mal y recomendó que se le hicieran una serie de exámenes médicos complicados.
Ellos no podían pagar los exámenes médicos, entonces sin querer hacerlo, decidieron regresar a Jimena donde Pepe y Celia, quien la aceptaron y pagaron por la evaluación medica necesaria. Cuando la evaluación fue hecha, el doctor los llevo a su oficina. “Bueno,” el les dijo “Es muy sencillo: Jimena no tiene cerebro.” Ella había nacido de apariencia normal, pero con solo un tronco cerebral y suficiente corteza cerebral para operar las funciones más básicas de la vida, como la respiración y la digestión.
Seis años después, Jimena todavía no ve, oye, mueve, o habla, pero ella esta cambiando vidas milagrosamente. Ella trajo una revolución de amor a la familia completa Carredano. Ella ha completamente asombrado a los doctores, quienes solo le dieron unos meses de vida. Ella a salvado vidas de al menos un bebe con Síndrome de Down a quien la mama decidió no abortar después de leer su historia. Y ella esta cambiando las mentes y los corazones cuando Celia la lleva a debates referente a temas de vida.
En este mundo fallido, cosas terribles pueden pasar, pero la Providencia de Dios es los suficientemente poderoso para darles vuelta. [información tomado de "Misión Imposible," una publicación de Good News."]
¡Que esta temporada de Adviento nos aumente nuestra conciencia de la venida del Señor y Salvador en cualquier momento! Hay que recordar que el reino de Dios está a la mano y El esta haciendo la diferencia en nuestras vidas a través de nosotros cambiando la vida de otros. ¡También hay que recordar que Dios nunca nos abandona, El siempre estará ahí para nosotros especialmente en momentos de necesidad y crisis!
Paz,
Padre Riz